Lo podríamos definir como la capacidad o habilidad de moverse. Entonces, salvo casos extremos de discapacidad, todos poseemos “movilidad” en mayor o menor medida, ¿no?.
Hasta ahí bien, ahora, lo que todos deberíamos preguntarnos:
Evolutivamente nuestro cuerpo está diseñado (molecularmente y genéticamente adaptado) para moverse, hasta tal punto que el hecho de estar sentados se podría considerar anti-natural. Lo preocupante es que hemos llegado a un punto en el que la persona promedio pasa de 9 a 10 horas al día sentado, cuando son muchos los expertos en ámbitos de la salud que concluyen: “Evitar Sentarse Es el Primer Paso Hacia una Vida Más Saludable”. Parece que esta idea ha empezado a calar en la sociedad ya que hay colegios y empresas que han empezado a implantar escritorios de pie y promover pautas periódicas de movimiento.
Si trabajas sentado 8 o más horas al día, la respuesta probablemente sea no. Salvo que te preocupes de “moverte” cada media hora (levantarte y caminar, estirar…), y a parte, practiques actividad física regularmente. Lo mínimo sería caminar 30-60 minutos al día, y lo ideal, complementarlo con otras actividades que impliquen mayor intensidad, es decir, que trabajen la fuerza o la resistencia. Al fin y al cabo, un cuerpo fit o funcional, es un cuerpo en forma, con múltiples capacidades.
Todos deberíamos hacer un test de movilidad básica antes de iniciar cualquier actividad física. Entrenar patrones de movimiento “pobres” hará que éstos empeoren además de aumentar el riesgo de lesión.